Quiero compartirte el propósito que me impulsa y el camino que me trajo hasta aquí, el cual elegí recorrer con conciencia, autocompasión y con la intención de convertirme en la adulta que mi niña interior tanto necesitaba.
Todo lo que hoy comparto nace de un lugar muy profundo y verdadero: mi propia historia.
De niña, anhelaba ser mirada, escuchada, sostenida sin condiciones ni juicios. Por mucho tiempo me sentí invisible e insuficiente como si tuviera que esforzarme para merecer amor. Aprendí a callar lo que sentía, a mostrarme fuerte, a adaptarme y complacer para encajar. Sonreía mientras por dentro algo dolía.
En lo profundo de mí, mi voz auténtica seguía ahí, esperándome. Con el tiempo, empecé a escucharla. Confié en ella, le di espacio y dejé que me guiara. Ese reencuentro marcó un antes y un después en mi vida. Abracé mis heridas y empecé a verme con otros ojos, a escucharme, a validar mis emociones, a reconocer mis necesidades sin culpa, a soltar la perfección como escudo y el miedo como guía.
Fue en ese proceso, profundamente transformador y revelador, donde entendí que acompañar a las infancias y sus familias también era una forma de cuidarme a mí. Comencé a automaternarme y autopaternarme.
Hoy elijo ser la adulta que escucha con el corazón abierto, que valida sin prisa, que acompaña con presencia amorosa, que abraza con el alma y guía con empatía, sin juicio.
En mi rol como psicóloga, acompaño la crianza de familias con hijas e hijos en la primera infancia. Desde un enfoque clínico, psicoeducativo e integral, ofrezco espacios de reflexión y sanación que permiten transformar la propia historia y, al mismo tiempo, honrar lxs niñxs que fuimos.
Estoy convencida de que la manera en que criamos tiene el poder de transformar(nos). Esto comienza por mirarnos, sentir nuestras heridas, nombrar lo que dolió, ponerle nombre a lo que callamos, no para quedarnos en el pasado, sino para permitirnos verlo con una mirada adulta, comprenderlo y sanarlo.
Desde ese lugar tan profundo, honesto y compasivo nace este espacio (en el que acompaño a personas a encontrar nuevas formas de criar, vincularse y de sanarse) con un propósito claro: que cada niñx pueda crecer en una familia que lo vea, valore y ame por quien es.
Facultad de Psicología – UDELAR
Instituto Govinda Mandala y Seeds of Love
Instituto Yvonne Laborda
Instituto Universitario de Salud Mental
Kuestiona – Borja Vilaseca
Universidad de los Andes
Summer Institute de Conscious Discipline de Becky Bailey
Niñez, desarrollo socioemocional y mindfulness – Universidad de los Andes